¿Qué pasa después del trasplante capilar?
La efectividad de los trasplantes es muy elevada y los resultados pueden observarse plenamente entre los nueve meses y el año, dado que no todos los folículos tienen el mismo ritmo de crecimiento. Es un tratamiento para el que se debe tener paciencia, pero que merece la pena por su enorme índice de efectividad.
Además el trasplante capilar produce un crecimiento absolutamente natural por las propias características de la intervención, evitando también el rechazo o la posterior caída.
Una vez realizada la intervención tendremos dos tipos de pelo en el área injertada, el pelo trasplantado y el pelo de transición. Como hemos comentado anteriormente, el pelo trasplantado, debido a su idiosincrasia, no vuelve a caerse, pero el pelo de transición con el paso del tiempo tenderá a debilitarse y perder grosor, para acabar cayendo, si no se lleva a cabo algún tratamiento capilar.
¿Qué ventajas tienen los tratamientos capilares post intervención?
Seguir un tratamiento capilar después de un trasplante capilar tiene muchas ventajas, incluyendo:
- Acelerar la recuperación: Los tratamientos capilares específicos después de un trasplante capilar ayudan a reducir la inflamación y la hinchazón, lo que acelera el proceso de recuperación.
- Mejorar la salud del cuero cabelludo: Los tratamientos capilares ayudan a mantener la salud del cuero cabelludo, lo que es importante para el crecimiento y la salud del cabello trasplantado, del cabello de la zona de transición y del pelo no trasplantado.
- Ayudar a evitar complicaciones: Los tratamientos capilares después de un trasplante capilar previenen la infecciones.
- Mejorar la apariencia del cabello: Los tratamientos capilares después de un trasplante capilar mejoran la apariencia del cabello, haciéndolo más fuerte, más brillante y más saludable.
En general, seguir un tratamiento capilar después de un trasplante capilar mejora los resultados y se asegura que el cabello trasplantado crezca fuerte y saludable a la vez que refuerza el pelo no trasplantado. Es importante hablar con un especialista sobre qué tratamientos son adecuados después de un trasplante capilar.
Tratamientos para después del trasplante capilar
Vitaminas
Después de un trasplante capilar, hay que tener una buena alimentación para ayudar en el proceso de curación y en el crecimiento de nuevos cabellos. Una dieta equilibrada y rica en vitaminas puede ser muy útil en este sentido.
El tratamiento de vitaminas después de un trasplante capilar suele incluir suplementos de vitaminas y minerales esenciales para la salud del cabello. Estos nutrientes son necesarios para mantener el cabello fuerte y saludable, y para promover su crecimiento.
Además, es necesario seguir las instrucciones del especialista sobre cómo cuidar el cabello después del trasplante, que pueden incluir evitar actividades que aumenten la tensión en la zona tratada, usar productos adecuados para el cuidado del cabello y del cuero cabelludo y proteger el cabello del sol y el viento.
En general, el tratamiento de vitaminas después de un trasplante capilar es una parte importante del proceso de recuperación y debe ser realizado bajo la supervisión de un profesional.
PRP (Plasma Rico en Plaquetas)
El PRP es un tratamiento muy útil para aumentar el grosor del tallo piloso, especialmente recomendable después de un trasplante de cabello, ya que favorece su crecimiento acortando los tiempos y haciendo que crezca con una mejor calidad. Pero es también muy útil si se tiene como único objetivo cuidar la salud capilar, sin haberse sometido a un trasplante.
- Regeneración de tejidos y acelera la cicatrización de heridas en la piel.
- Ayuda a fortalecer el cabello.
- El PRP actúa en la piel, estimulando elastina y colágeno , que son células dérmicas que mejoran el aspecto de la piel.
- Estimula el crecimiento folicular.
- Aumenta la circulación sanguínea a nivel de los folículos pilosos potenciando la regeneración y engrosamiento de los mismos.
- Actúa minimizando cicatrices y mejorando daños del fotoenvejecimiento.
Mesoterapia
La Mesoterapia es una técnica no invasiva basada en microinyecciones superficiales, justo debajo de la epidermis, en los tejidos diana. El término «meso» se deriva del mesodermo o capa media de la piel (aprox. 1 mm de profundidad). Es un tratamiento que estimula el mesodermo, que alivia una amplia variedad de síntomas y dolencias. La solución inyectada puede contener una amplia gama de minerales, vitaminas, aminoácidos, ácidos nucleicos y coenzimas que pueden adaptarse a las necesidades individuales de cada paciente.
- Reduce notablemente la pérdida del pelo y ayuda a frenar la alopecia.
- Repara fibras dañadas y aumenta el grosor al cabello.
- Aumenta la creación de queratina consiguiendo más brillo y vitalidad.
- Se estimula la circulación sanguínea para favorecer la velocidad de crecimiento del cabello.
- Es tan o más efectiva que las cápsulas en el rejuvenecimiento y restauración del cabello.
- La Mesoterapia lleva los compuestos adecuados al lugar exacto donde se necesita (alrededor del folículo piloso)
- El folículo piloso puede crecer y sobrevivir de nuevo a su fase anágena original.
- Después del tratamiento, puede volver a sus actividades con normalidad.
Dutasteride
La Dutasterida es un fármaco que actúa como inhibidor de la enzima 5 alfa reductasa y favorece el engrosamiento de las unidades foliculares, contribuyendo a frenar la caída del pelo.
El objetivo de estas infiltraciones es aplicar el fármaco en la raíz folicular para favorecer que ejerza una acción directa en su fortalecimiento. Los pacientes comienzan a notar los resultados a las semanas de la aplicación del tratamiento.
- Aumenta la densidad capilar.
- Fortalece el pelo.
- Estabiliza su caída, dado que frena y revierte el proceso de miniaturización de los cabellos que produce la alopecia.
- Se minimizan los efectos secundarios en comparación con los que puede provocar el consumo recurrente de fármacos orales.